Luego de conocerse en medios su relación con la empresa fantasma Rivera Álamo, la funcionaria de Coahuila, María Esther Monsivais Guajardo, renunció a la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Seint) tras ser acusada por desviar 24 millones de pesos durante 2016 y una cifra similar durante 2015.
A través de un comunicado enviado a medios, Monsiváis Guajardo negó estar implicada con la empresa fantasma y con el desvío de dinero.
El descaro, la empresa fantasma y el comunicado a medios
Aún con la negación de dicha investigación, Monsiváis anunció su separación del cargo como titular de la Seint de Coahuila en “aras de manejarse con transparencia” y el correcto uso de los recursos públicos.
Con plena convicción de que no participó en el desvío y en la “supuesta empresa fantasma”
el gobierno estatal aceptó su renuncia emitiendo un comunicado a medios en el que Rubén Moreira aceptó la decisión de la exfuncionaria.
Riviera Álamos, la empresa fantasma y las publicaciones de los medios
La empresa fantasma Riviera Álamo, se ubica en la calle Irlanda 910, interior A, en la colonia Villa Olímpica en Saltillo. Se dedica a la construcción y urbanización, aunque tramita certificados, realiza convenios y funge como medios de producción de granos y forrajes.
Vanguardia, uno de los medios de comunicación por excelencia, ha publicado que autoridades han llamado a investigaciones por compras a presuntas empresas “fantasma” que le vendieron diversos objetos al Gobierno del Estado, incluyendo una de ella que ha sido ligada con María Esther Monsiváis, ex secretaria de Infraestructura del Estado, quien pidió licencia al cargo tras conocerse esta información.